No deshojaré la útima rosa
por piedad a un recuerdo
mientras que duermes en un sueño sin tiempo
vivo culto al ángel que se
repliega sobre mi nicho daré
entre frondosas nubes de incienso
mi corazón ahogaré
mis manos rígidas caen, descansan
debajo del frío alud,
mi carne se abre con sopor
cuando suave te deslizas entre sombras tornasol
preciada alma, sin cesar
el llanto recogí tu resto exánime
tan intenso perfume tu piel libera
siento como tu tibieza se dispersa, y ya no regresa
veo empalar mil almas, el ápice
de las lanzas que se retuerce
en tu interior
si pudiera salvarte...musa que inspiras mi dolor
anochecer tu pena, iluminarte el rostro
en un claro de luna azul
mi sangre fluye eterna, por el lago del terror
¿podrá mi ánima ahora escapar del temor?
¿o al infinito deseo debo ceder, y ocultar mi rostro
tras velos de hiel?
enciende tu clamor, y ruega
complaciente a tu Dios
pero recuerda, mientras, que duermo
en tu interior.
1 comentario:
Es hermoso... tan hermoso...
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