así como la tierra que sobre su eje gira, mi alma en mí gira también, el día que su flujo cese, el día de mi muerte será, pues sin un alma alboratada qué más que un cadáver su morada se convertirá.

jueves, septiembre 08, 2005

Inútil

Hundo mis ojos en el mar, cada vez que miro parece alejarse más de mí. En un sótano he escondido mis miedos, mis sueños, un piano y el perfume que llevabas cuando te conocí. No hay luz allá abajo, sólo frío, polvo y memoria quemándose prolijamente. El mar me acaricia esta noche, y todavía hay sirenas que me dejan soñar...quiero sus voces, quiero ser hermosa como un cristal. Perlas y arena, el agua va subiendo hasta mi mentón, espera sigilosa, y derrepente sube hasta mi boca, llenando un vacío...terminando con este mal que me aqueja desde que nadaste hasta el fondo del mar. La soberbia ya no me ofende, la tristeza me parece vanal, no hay centímetro de mi cuerpo que no hayas castigado, no tengo heridas que ocultar si nadie hay escondido en mi sombra. No me sirven las metáforas, no necesito que sientas lástima por mí... no voy a descoser mi orgullo, ni a recoger los pedazos de mi corazón... Hay alguien a mi alrededor? Puedo escuchar todavía esa canción? Impredecible, inevitable sentirme así...Si estoy vacía, qué es lo que punza aquí dentro?

No hay comentarios.: